Después de nuestro adorable encuentro en la carretera seguimos camino a Kota Bharu, la capital del estado de Kelantan y la punta oeste más septentrional del país.
La mayoría de los turistas llegan hasta este punto del país (o hasta Terengganu) con la intención de visitar las islas Prenthians que no os voy a mentir, tienen una pinta estupenda. Nosotros por el contrario lo hicimos por hacer kilómetros y recorrer la parte peninsular del país al máximo. Al decantarnos por coche y carretera realmente abandonamos la idea de visitar islas. Por otro lado, conscientes de que nuestros siguientes destinos serían Indonesia y Filipinas y que justo veníamos de Sri Lanka, sabíamos que no era una prioridad en ese preciso momento.
Sinceramente (y habiendo dicho que no hemos estado en ninguna, pero si investigado sobre todas) si has de elegir entre visitar alguna isla durante tu estancia en Malasia olvídate de Langkawi y ve directo a las Pherentian que son un paraiso tropical en toda regla. En las Perenthian no hay carreteras y tendrás una playas y aguas turquesas de impacto.
Si tu problema es el presupuesto entonces elige Kecil, la más pequeña de las dos y la que tiene más opciones para turistas de todo tipo, mientras que Besar opta por villas lujosas y turismo de bolsillo ancho.
Mercados flotantes en Kota Bharu
Pero como os he dicho, nosotros no estábamos aquí por las islas, así que nos fuimos en busca de todo lo que pudimos encontrar que no salía en las guías e intentamos encontrar un mercado flotante que supuestamente tenía lugar en Tumpat. No encontramos nada ya que al parecer solo están abiertos los sábados y comienzan temprano y terminan antes del medio día.
No esperéis nada gigante, es una zona pequeña con poco turismo, por lo que de antemano nos prepararon para ver máximo 15 barcos, en cualquier caso no vimos ninguno pero pudimos disfrutar de la zona completamente para nosotros y no estuvo del todo mal.
Después de dejar Tumpat y con mucho tiempo en las manos decidimos “irnos de wats”, básicamente la manera en la que nos referimos a visitar templos (en este caso budistas) en la zona donde para que os hagáis una idea hay más de 25.
Visitamos varios pero no os voy a mentir, de la mayoría no recuerdo el nombre y muchos tampoco eran gran cosa. En cualquier caso aquí os dejamos los dos que más nos gustaron. Seguro que hay más super interesantes, tampoco visitamos los 25, pero nos gustó el plan para pasar el día y aprender un poco más de la zona. Además todos son de entrada gratuita.
Wat Photivihan
Comenzamos por este ya que tiene la estatua de un Budha durmiendo de 40 metros de largo construida en 1975. De hecho el Budha durmiente de Photivihan fue el más grande de todo el sudeste asiático hasta que fue superada por la estatua de 66 metros del largo del templo budista de Chaukhtagyi en Myanmar, donde tiene un poco más de sentido ya que Malasia es un país mayoritariamente musulmán mientras que Myanmar es un país mayoritariamente budista. Es evidente que n esta zona del país hay una influencia muy fuerte del budismo tailandés debido a la cercanía.
Wat Mai Suwankiri
Se dice que el templo original fue construido hace más de 400 años por artesanos tailandeses. El templo actual fue construido con los fondos de asociaciones budistas tanto de Tailandia como de Malasia y cubre 4 hectáreas.
La parte central es la más impresionante, en ella se representa un barco hecho de dragones donde se ve una clara influencia del estilo tailandés, lo cual como hemos dicho no es una sorpresa debido a la cercanía de la zona con la frontera.
Terengganu y su mezquita de cristal
Al día siguiente decidimos hacer una corta visita de un par de días a la ciudad de Terengganu. No necesitas dos días, nosotros simplemente nos vamos moviendo pero con un día es más que suficiente.
En Terengganu visitamos la mezquita de cristal, sin duda la más llamativa que vimos en todo el país. Toda la estructura se encuentra hecha de cristal y espejos y fue terminada en el 2008 con una capacidad de 1500 personas.
De noche es alucinante.
Tuvimos además la suerte de estar por la zona durante el mismo momento en el que una visita de un cole de bachillerato también pasaba por allí. Así, que en vez de ir a ver la atracción principal de la ciudad, terminamos nosotros siendo la atracción principal lo cual fue bastante divertido. Estuvimos un buen rato charlando con los chicos y chicas y haciéndonos miles de selfies como es debido y después de un par de horas dejamos el complejo.
Terengganu Chinatown
Otra de las paradas que hicimos en la ciudad antes de volver al interior del país fue nuestro corto paso por el Chinatown de Terengganu. Si lo comparamos con las versiones de otras ciudades como Melaka o Penang no tiene nada que ver y es relativamente modesto, pero aún así fue interesante pasearnos por la zona, especialmente porque durante nuestra visita a Malasia se preparaban las festividades del año nuevo chino que tendrían lugar en menos de un mes.
Es importante tener en cuenta que tal y como os comentamos la diversidad es algo MUY importante y muy evidente en Malasia ya que de hecho “solo” el 50% de la población es de origen malayo, el 23% de origen chino y hay un 7,1 % de origen Indio entre otras etnias.
Disfruta de una comida en plena playa
Una gran parte de la carretera que une Kota Bharu con Terengganu es playa y no está nada mal. Nosotros siempre terminamos en los países cuando es época de lluvias, pero no tiene porque ser el caso y de no ser así la temperatura es bastante digna como para disfrutar un poco de la playa, especialmente si no tienes tiempo o presupuesto para visitar las islas Perenthian.
Nosotros paramos para comer en un pequeño chiringuito que encontramos y nos pareció digno. La verdad es que como os comentamos la comida en Malasia no será un problema en absoluto ya que la oferta es super amplia, muy salubre y deliciosa.
Esta zona no es una zona muy turística pero eso no significa que no haya nada que hacer, todo depende de tus intereses y tu curiosidad. Si tienes algo más que añadir no dudes en usar el sistema de comentarios.
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