Guía completa para viajar a Lisboa

Contenido:

Ahhhh Lisboa!

Hacía años que no me pasaba por aquí y hacía la misma cantidad de años que le tenía muchas ganas. Fui a Lisboa hace al menos 15 años, pasé unos 4 días por la ciudad y la verdad es que me enamoró, otra de esas ciudades de la lista de “lugares en los que viviría alguna vez en mi vida” que nunca conseguí tachar.

El tiempo y las prioridades han ido pasando y cambiando y Lisboa se quedó en esa cajita, pero finalmente con el viaje de 15 días por Portugal puede volver a desempolvarla y pasear por sus calles y, aunque muchas cosas han cambiado desde entonces, puedo decir que sigue teniendo cierta llamada. Quizá en algún momento en los próximos años decida pasarme por aquí unos meses, de momento estuve 4 días y caminé dos maratones completas, así que nos dio como para conocerla a gusto.

Cómo llegar a Lisboa

Cómo llegar a Lisboa en avión

La manera más sencilla de llegar a Lisboa es en avión. El Aeropuerto Humberto Delgado (LIS) se encuentra a solo 7 km del centro de la ciudad, es literal menos de 15 minutos y está bien conectado con las principales ciudades europeas y de otros continentes. Las aerolíneas de bajo coste como Ryanair y EasyJet, así como las principales aerolíneas como TAP Portugal, ofrecen vuelos frecuentes a Lisboa. Si vuelves desde el mismo aeropuerto no te fíes de la corta distancia. La logística de la entrada al aeropuerto es un poco caótica y puedes llegar a pasar otros 30 minutos en un atasco.

El aeropuerto tiene dos terminales, para ir a la secundaria solo tienes que tomar un autobús gratuito de menos de 5 minutos que pasa cada 10 minutos.

Cómo ir desde el aeropuerto al centro de Lisboa

La línea roja del metro te llevará directamente desde el aeropuerto hasta el centro de la ciudad en aproximadamente 20 minutos. El billete cuesta alrededor de 1.50 EUR.
El Aerobús es una opción cómoda, aunque un poco más cara (4 EUR ida, 6 EUR ida y vuelta). Hay varios autobuses urbanos que también cubren esta ruta.
Taxi: Un taxi desde el aeropuerto al centro de Lisboa cuesta entre 15 y 20 EUR, dependiendo del tráfico pero si tomas un Bolt o un Uber podrás hacer el trayecto por unos 7 EUR.

Para tomar el metro no te estreses, busca en el mapa al lado de la máquina el nombre de tu parada. Al lado de cada parada encontrarás algo como z1 o z4… esa es tu zona, compra un billete a esa zona. La gente se vuelve un lío con el sistema y es fácil. Sigue siempre el mismo ritual si tienes que comprar tickets nuevos, simplemente busca tu parada en la tabla y ya.

Metro Lisboa

Cómo moverte por Lisboa

El metro de Lisboa es pequeño, eficiente y fácil de usar. Consta de solo cuatro líneas (azul, amarilla, verde y roja) que cubren la mayor parte de la ciudad. Un billete sencillo cuesta 1.50 EUR, pero si piensas usarlo con frecuencia, te recomendamos comprar la tarjeta recargable “Viva Viagem” por 0.50 EUR, que puedes cargar con viajes individuales o con pases diarios (6.40 EUR para viajes ilimitados en un día). Los autobuses urbanos te costarán lo mismo.

Los tranvías son uno de los símbolos de Lisboa, especialmente el famoso Tranvía 28, que recorre muchos de los principales puntos turísticos de la ciudad. Un billete sencillo cuesta 3 EUR, pero con la tarjeta Viva Viagem puedes obtener descuentos.

El tranvía 28 suele estar abarrotado de turistas, entiendo que sea uno de los más usados porque literal pasa por todos los puntos turísticos, pero nosotros teníamos la mala (¿o buena?) suerte de que era la línea que literal teníamos al lado de casa y era imposible usarla, motivo por el que acabamos caminando una barbaridad (y no nos quejamos), al final el día que decidimos subirnos lo que hicimos fue irnos al inicio de la línea, que la teníamos a menos de 10 minutos, por lo que si quieres hacer la típica ruta supongo que lo mejor será hacerlo a primera hora de la mañana.

Sinceramente no sé si es porque estaban en algún tipo de lanzamiento o promoción pero terminamos moviéndonos en Bolt un montón porque los trayectos os juro que costaban menos de 3€ y normalmente los tomábamos desde el culo del mundo después de haber caminado 20 kilómetros y sin ganas ni de ir al metro. Al final nos mal acostumbramos un poco porque literal aparte de un par de veces que tomamos el tram acabamos moviéndonos andando y en Bolt el 90% del tiempo.

Mejor época para visitar Lisboa

Lisboa tiene un clima mediterráneo, con inviernos suaves y veranos cálidos. La mejor época para visitar es en primavera (abril a junio) y otoño (septiembre a noviembre), cuando el clima es agradable y hay menos turistas. Nosotros viajamos durante el final de Junio y hace suficiente calor como para sentirte en unas vacaciones de verano, pero es llevadero. No me imagino las temperaturas de medio agosto.

Primavera: Las temperaturas oscilan entre los 15 y 25 grados, ideal para explorar la ciudad sin restricciones.
Verano: Puede ser bastante caluroso, con temperaturas que alcanzan los 30 grados o más, y es también la temporada alta de turismo.
Otoño: Temperaturas similares a la primavera, con la ventaja de menos turistas.
Invierno: A pesar de ser la temporada más fresca, las temperaturas rara vez bajan de los 10 grados, lo que la hace una opción viable si buscas evitar las multitudes.

Qué ver en Lisboa

Castillo de San Jorge

El Castillo de San Jorge, situado en la cima de la colina más alta de Lisboa, ha sido un punto estratégico desde la época romana, pasando por los visigodos y los moros, hasta la reconquista cristiana en el siglo XII. Este castillo ha sido testigo de batallas, asedios y cambios de poder a lo largo de los siglos. Ofrece algunas de las mejores vistas panorámicas de Lisboa y el río Tajo. Durante la ocupación árabe, el castillo era conocido como el Castillo de los Mouros. Fue rebautizado en honor a San Jorge después de la reconquista cristiana como símbolo de protección y de la victoria sobre los moros.

Nosotros la verdad no lo vimos por dentro más que nada por un tema de tiempo, con 4 días queríamos caminar mucho y conocer muchos rincones además de las excursiones fuera de la ciudad así que lo dejamos en la lista de cosas por hacer por si nos daba la vida pero lo pongo aquí porque no solo es interesante sino que lo tendrás presente allí donde vayas. Si no lo visitas por dentro al menos acércate .

Precio: La entrada general cuesta 10 EUR. Los estudiantes, mayores de 65 años y personas con discapacidad tienen un descuento y pagan 5 EUR. Menores de 12 años entran gratis.

Horarios: Abierto todos los días de marzo a octubre de 9:00 a 21:00 y de noviembre a febrero de 9:00 a 18:00.

Lisboa, Portugal

Elevador de Santa Justa

Inaugurado en 1902 (sí, alucinad), el Elevador de Santa Justa es un ascensor neogótico diseñado por Raoul Mesnier du Ponsard, un aprendiz de Gustave Eiffel. Este ascensor conecta la Baixa con el Barrio Alto y es una obra maestra de la ingeniería del siglo XIX. Su estructura de hierro forjado es única en Lisboa y ofrece vistas impresionantes de la ciudad. Originalmente, el elevador funcionaba a vapor, pero fue electrificado en 1907. La plataforma superior ofrece una vista de 360 grados de Lisboa y es especialmente popular al atardecer.

Precio: Un billete sencillo cuesta 5.30 EUR, lo que incluye el acceso a la plataforma superior. Pero puedes hacerlo gratis con la tarjeta de transporte “Viva Viagem”.

Horarios: Abierto todos los días de 7:00 a 23:00.

Mercado da Ribeira

Inaugurado en 1892, el Mercado da Ribeira es el mercado más grande de Lisboa. En 2014, Time Out Lisboa transformó una parte del mercado en un espacio gastronómico con algunos de los mejores chefs de la ciudad. Este mercado es ahora un punto de encuentro tanto para locales como para turistas, ofreciendo una amplia variedad de comidas y bebidas. Además de su oferta gastronómica, el Time Out Market organiza eventos culturales, talleres y presentaciones en vivo, convirtiéndose en un centro de actividad cultural en Lisboa.

Precio: La entrada es gratuita, pero los precios de la comida varían según el puesto.

Horarios: Abierto todos los días de 10:00 a 24:00 (domingo a miércoles) y de 10:00 a 2:00 (jueves a sábado).

Catedral de Lisboa (Sé de Lisboa)

La Catedral de Lisboa, conocida localmente como Sé de Lisboa, fue construida en el siglo XII sobre una antigua mezquita después de la reconquista cristiana. Es el edificio religioso más antiguo de la ciudad y ha sido testigo de numerosos eventos históricos, incluidos terremotos y reconstrucciones.

Dato curioso: La catedral alberga las reliquias de San Vicente, el santo patrón de Lisboa, que fueron traídas a la ciudad en el siglo XII. Las torres gemelas de la catedral ofrecen vistas impresionantes de la ciudad.

Precio: La entrada a la catedral es gratuita, pero la visita al claustro y al tesoro cuesta 4 EUR.

Horarios: Abierto todos los días de 9:00 a 19:00.

Mirador de Santa Catarina

También conocido como Miradouro de Adamastor, este mirador ofrece unas vistas espectaculares del río Tajo y el puente 25 de Abril. Es un lugar popular para relajarse y disfrutar del atardecer, y lleva el nombre de Adamastor, una figura mitológica de la literatura portuguesa que representa los peligros del mar. El mirador es un punto de encuentro para músicos callejeros y artistas, creando un ambiente vibrante y cultural. También es conocido por su estatua de Adamastor, que es un símbolo del coraje y la exploración marítima portuguesa.

Precio: Entrada gratuita.

Horarios: Abierto las 24 horas del día, todos los días.

Camina por la Alfama hasta perderte

El barrio de Alfama es el alma de Lisboa, es el corazón histórico de Lisboa y el único barrio que sobrevivió al gran terremoto de 1755, gracias a su ubicación en la colina y su estructura laberíntica. Su nombre proviene del árabe “al-hamma”, que significa “fuente o baños calientes”, un reflejo de sus orígenes como un barrio árabe en la época de la dominación islámica (siglos VIII al XII).

Históricamente, Alfama fue hogar de pescadores y clases trabajadoras, y aunque su fama de barrio humilde persiste, hoy es uno de los lugares más vibrantes y auténticos de la ciudad. Es también el alma del fado, la música tradicional portuguesa cargada de melancolía. Un barrio que parece detenerse en el tiempo con sus calles empedradas, ropa tendida en los balcones y una atmósfera de fado que se siente en cada rincón. Este antiguo barrio árabe es perfecto para dejarse llevar por las calles que serpentean, explorar sus plazas escondidas y descubrir miradores como el de Santa Luzia, con vistas al río Tajo. Justo por este barrio encontrarás en sus alturas el Castillo de San Jorge y la Catedral de Lisboa, pero para mi lo mejor son sus callecitas en la parte baja donde de hecho, aunque se trate de una ciudad abarrotada de turista, tendrás paz en muchos momentos.

Mirador de São Pedro de Alcântara

Dado que Lisboa es una ciudad de colinas te encontrarás con varios miradores que valen la pena en la ciudad. El mirador de São Pedro de Alcântara ofrece unas vistas panorámicas de la Baixa y el Castillo de San Jorge. Es un lugar ideal para hacer una pausa y disfrutar del paisaje, con bancos y jardines bien cuidados. El mirador cuenta con un mapa de azulejos que muestra los principales puntos de interés que se pueden ver desde allí, facilitando la identificación de los monumentos y edificios históricos de Lisboa.

Precio: Entrada gratuita.

Horarios: Abierto las 24 horas del día, todos los días.

Si quieres saber más sobre los miradores de la ciudad puedes verlo en este artículo especifico. Los mejores miradores de Lisboa

Torre de Belém

Aunque aquí realmente ya nos vamos a Belém, no al centro de Lisboa, La Torre de Belém es una de las estampas típicas de la ciudad. Construida entre 1514 y 1520, es uno de los iconos más reconocidos de Lisboa y un símbolo de la era de los descubrimientos de Portugal. Esta fortaleza fue originalmente construida para defender la entrada al puerto de Lisboa, pero también sirvió como punto de partida para muchos de los exploradores portugueses que navegaron hacia el Nuevo Mundo. La torre es un ejemplo perfecto del estilo manuelino, con sus elaborados detalles góticos y renacentistas.

Dato curioso: Durante la era de los descubrimientos, la torre fue rodeada por el río Tajo debido a la modificación del curso del río después del terremoto de 1755. Hoy en día, la torre se encuentra en la orilla, pero en su momento estaba en una pequeña isla en medio del río.

Ps: si no sabes si vale o no vale la pena ir a comer pastelitos de Belém directamente en la fábrica que les da nombre, yo, como buena hater de las cosas turísticas te podría decir que te los ahorraras… PERO NO. Soy una ferviente amante del pastel de nata y tengo que decirte que es el mejor puto pastel de nata que he probado en mi vida. La cola fue corta, son super rápidos atendiendo, los precios están bien y son EXQUISITOS, compramos un paquete de 6 que nos comimos en el parque y casi lloramos de alegría. 

Precio: La entrada general cuesta 6 EUR, pero es gratuita los primeros domingos de cada mes y para menores de 12 años.

Horarios: Abierto de octubre a abril de 10:00 a 17:30 y de mayo a septiembre de 10:00 a 18:30. Cerrado los lunes y el 1 de enero, 1 de mayo, 13 de junio y 25 de diciembre.

Monasterio de los Jerónimos

Muy cerca a la Torre de Belém el Monasterio de los Jerónimos fue destruido en el siglo XVI y es una joya arquitectónica del estilo manuelino. El monasterio fue fundado por el rey Manuel I para conmemorar el regreso de Vasco da Gama de su viaje a la India. Este magnífico edificio ha sido testigo de importantes eventos históricos y es el lugar de descanso final de Vasco da Gama y el poeta Luís de Camões, dos figuras emblemáticas de la historia portuguesa. La construcción del monasterio se financió en gran parte con el “impuesto del comercio de especias”, una tarifa aplicada sobre las mercancías traídas de Asia y África, que reflejaba la riqueza y el poder de Portugal en ese momento.

Precio: La entrada cuesta 10 EUR para adultos. Es gratuita para menores de 12 años y los primeros domingos de cada mes.

Horarios: Abierto de octubre a abril de 10:00 a 17:30 y de mayo a septiembre de 10:00 a 18:30. Cerrado los lunes y el 1 de enero, 1 de mayo, 13 de junio y 25 de diciembre.

LX Factory

LX Factory es un espacio cultural y artístico ubicado en una antigua fábrica textil del siglo XIX en el barrio de Alcântara. Este lugar se ha convertido en uno de los hubs más vibrantes de Lisboa, es un rinconcito hipster con buenas vibras y variedad de planes. Dentro podrás encontrar pequeñas tiendas como la librería de Ler Devagar o algunas otras tiendas de souvenirs de diseño (atención, los precios no son los más baratos de la ciudad). Si lo que quieres es pasar la tarde también puedes comer y beber en cualquiera e sus locales con terracitas, incluídas algunas con rooftop como las de Rio Maravilha.

Cómo llegar: Nosotros vinimos caminando desde Belém y de allí tomamos un bolt (lo que os comentaba un poco al inicio) pero obviamente puedes llegar en transporte público con las líneas 714, 727 y 751 o con el tranvía 15E (parada Calvário)

Horario: Generalmente, LX Factory está abierta de 10:00 a 22:00, aunque algunos restaurantes y bares permanecen abiertos hasta más tarde. Los domingos suelen organizar mercados al aire libre durante el día.

LX Factory. Lisboa

Paseo por el Tajo en Barco

Un paseo en barco por el río Tajo es una experiencia, nosotros al final no lo hicimos por falta de tiempo y porque, como os dije, somos mucho de caminar, pero la opción la tuvimos presente hasta íltimo momento. Desde el agua, la ciudad ofrece una perspectiva única, con vistas al Puente 25 de Abril, la Torre de Belém y el Monumento a los Descubrimientos (todo lo que nosotros hicimos a pie). Si quieres una opción para cómo mínimo pasar por el rio lo puedes hacer con un ferry local hasta Cacilhas. Obviamente si quieres algo más completo hay pequeños cruceros al atardecer con una copa de vino.  Los cruceros normalmente duran un par de horas y cuestan unos 18€ por adulto. Hay paquetes de dos niños y dos adultos por 46€, hay varias empresas, esa fue una de las que vimos así que dudo que los precios varíen mucho de una a otra.

Horario: Salidas desde las 11:00 hasta el atardecer.
Cómo llegar: Desde Cais do Sodré.

Descubre Graça, el barrio trendy de Lisboa

Graça, situado en la cima de una de las siete colinas de la ciudad, es un barrio lleno de historia y carácter. Originalmente, fue un asentamiento de campesinos fuera de las murallas de la ciudad, pero ganó importancia con la construcción del Convento da Graça en el siglo XVI. Este convento, que ahora es una iglesia, alberga impresionantes frescos barrocos y una ubicación privilegiada que domina Lisboa. Con un ambiente tranquilo y residencial lo convierte en un lugar perfecto para quienes buscan escapar del bullicio turístico sin perder el encanto. Aquí, las calles estrechas están llenas de pequeños comercios locales, tabernas familiares y una comunidad que aún conserva su esencia lisboeta. Aunque no es tan famoso como Alfama, Graça tiene una personalidad vibrante que mezcla historia y cultura.

Un dato curioso sobre Graça es su papel en las fiestas de Lisboa, especialmente durante las celebraciones de San Antonio en junio. Las calles del barrio se llenan de sardinas asadas, música y decoraciones. También es un lugar donde el arte callejero ha dejado su huella, con murales y graffitis que aportan un toque moderno y vibrante a sus rincones históricos. Finalmente, gracias a su localización, es conocido por sus miradores. El Miradouro da Senhora do Monte es el punto más alto de Lisboa y ofrece vistas panorámicas de la ciudad, el río Tajo y el Castillo de San Jorge. También está el Miradouro da Graça, donde puedes disfrutar de una bebida en su terraza mientras contemplas la ciudad.

Compra los mejores souvenirs en el mercado de las pulgas de Santa Clara

Los que me seguís de hace tiempo también tenéis que saber que algo que me pierde en las ciudades son los mercadillos. Me he cruzado ciudades enteras para ir a visitar un mercadillo, algunos han valido mucho la pena, otros no tanto, pero si os soy sincera en todos me lo paso de maravilla y en casi todos me acabo llevando algo. Para mi es el perfecto lugar para llevarme algo muy especifico del país o de la ciudad que acabará en mi apartamento como un pequeño tesoro.

El Mercado de Santa Clara, conocido localmente como “Feira da Ladra” (Mercado de la Ladrona), es el mercadillo más antiguo y famoso de Lisboa, así que claramente no podía saltármelo. Se celebra todos los martes y sábados en el Campo de Santa Clara, cerca del barrio de Alfama. Su origen se remonta al siglo XIII, y aunque su nombre podría sugerirlo, no se trata de un mercado de objetos robados :P. Aquí tienes un poco de todo y algunas cosas a buen precio, entre sus puestos, encontrarás una mezcla ecléctica de antigüedades, ropa de segunda mano, discos de vinilo, libros antiguos, azulejos típicos portugueses, y objetos decorativos. También hay espacio para el arte local, con artesanos y artistas que exponen sus creaciones. Algunas de las tiendas de los alrededores también valen mucho la pena, como la tienda de cerámicas Sant Clara de donde nos llevamos unas cuantas cositas (entre ellas un salero en forma de pastel de Belém)

El mercado se extiende alrededor del Panteón Nacional, así que de paso puedes aprovechar para visitar el monumento y disfrutar de las vistas desde su cúpula.

Cómo llegar: En tranvía puedes tomar el 28E y bájate en la parada “Santa Clara”. En autobús con las líneas 712 o 734 desde el centro de Lisboa.
Horario: Martes y sábados, de 09:00 a 18:00 aproximadamente.

Santa Clara, Lisboa

Excursiones de un día desde Lisboa

¿Te sobra tiempo? Me sorprende, pero de ser así tranquilos, lo que hay son más y más cosas por hacer.
Muy probablemente algo que no vas a dejar por hacer es Sintra (aunque yo no lo visité la primera vez que vine a la ciudad porque para entonces el presupuesto no daba). Sintra está a solo 30 minutos en tren desde la capital. Patrimonio de la Humanidad, es conocido por sus palacios de cuento (aunque también tiene un poco bastante de postureo que os explicaré mejor en la guía para visitar Sintra). El Palacio da Pena es  la atracción más icónica. Para visitar Sintra necesitaras un día entero, no intentes hacerlo en menos porque acabarás reventado y no te preocupes si no eres de visitar monumento tras monumento, tenemos algún plan alternativo que puedes hacer allí sin gastar dinero que nos encanto! ;D

Otra excursión que nos mencionaron es el paseo a Cascais, un pequeño pueblo costero a unos 40 minutos en tren desde la estación de Cais do Sodré. Conocido por sus playas y su ambiente relajado, Cascais combina historia y naturaleza. Si buscas playa, la Praia do Guincho es un paraíso para surfistas y amantes del viento.

Para un viaje al pasado medieval, puedes visitar  Óbidos, un pueblo amurallado que parece sacado de otro cuento. A poco más de una hora en autobús o coche desde Lisboa, Óbidos te recibe con sus calles empedradas, casas blancas adornadas con flores y su imponente castillo. Pasea por la muralla, prueba la famosa ginjinha (licor de cereza) en una taza de chocolate y piérdete en sus rincones llenos de historia. Este destino es ideal para quienes buscan tranquilidad y un ambiente romántico.

Dónde dormir en Lisboa

Sinceramente la ciudad es pequeña, duerme donde encuentres que te parezca más bonito y más barato. Nosotros nos alojamos en una habitación grandísima en un apartamento compartido (todas habitaciones de alquiler) muy cerca de Graça por la zona de la academia militar. En unos 25 minutos caminando estábamos en el centro y nunca nos pareció tener nada lejos, aunque eso sí, como te he dicho, nos gusta caminar. La habitación además tenía un pequeño balconcito donde podíamos comer en privacidad y tranquilos.

En general muy contentos con la zona porque era muy residencial y se podía dormir sin ningún tipo de problema, algo que conforme me hago vieja me parece más y más importante. Te dejo el enlace de nuestro apartamento pero mira sin miedo por la ciudad. Recuerda que si reservas desde esta web o este mapa me das una pequeña propina que a ti no te cuesta absolutamente nada y me ayudas a seguir manteniendo este blog 🙂

Otros consejos generales para visitar Lisboa

  • Es conocida como “La ciudad de las 7 colinas”, vas a caminar y vas a subir escaleras como si noi hubiese un mañana, así que lleva calzado cómodo y a poder ser una mochila y no una maleta de ruedas. A menos que el primer y último trayecto de la ciudad lo vayas a hacer en taxi (que como te comentamos están a precios bastante accesibles).
  • Si vas a viajar mucho en transporte público compra la tarjeta Viva Viagem

Seguro que me dejo mil cosas en el tintero porque la verdad es que recorrimos la ciudad a gusto, donde comer, donde tomaros una copa… mil cositas más, pero lo más probable es que lo vaya o añadiendo conforme me voy acordando o lo vaya dejando en guías separadas de la ciudad. Como siempre recuerda que si tienes preguntas o actualizaciones puedes dejarlas en los comentarios. Espero que te sea de ayuda para planificar tu viaje a Lisboa. Si vas a estar más días por el país no te pierdas esta Ruta de 15 días por Portugal.

 

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